El cuerpo ya sentía el desvelo, pero mucho mayor era la ansiedad por conocer los resultados de un proceso electoral que definiría si Venezuela se transformaría en un sistema socialista autoritario o si por el contrario seguiría siendo una democracia plural y participativa.
Las tensiones se hicieron sentir, en especial, una vez que el reloj apuntaba que habían transcurrido más de siete horas desde que la Rectora Principal del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena ordeno que se cerraran las mesas de votación.
La oposición se preguntaba ¡Que estaba sucediendo? Porque la demora? Será que el gobierno desea hacer un fraude? A su vez los rumores sobre los resultados por momentos daban al Si como ganador, luego al No, era una situación de total incertidumbre, la gran pregunta era: Defenderá Venezuela su democracia o acaso esta dispuesta a perder su protagonismo como un país suramericano que a lo largo de su historia busco la libertad?
Llego el momento crucial. Pasada la una de la mañana, el CNE dio el primer boletín con los resultados, fue entonces cuando el pueblo venezolano pudo confirmar el triunfo del NO y es que se trataba de la primera victoria de la oposición en los nueve anos de gobierno que tiene Hugo Chávez Frías.
Inmediatamente que esta noticia se hizo publica, se escucho un eco de alegría, las voces de miles de personas que al unísono gritaban “GANAMOS, VIVA VENEZUELA GANAMOS”, se escuchaban coros de jóvenes cantando: “yo me quedo en Venezuela porque yo soy optimista”, “Estudiantes, libertad”, “Viva la democracia”. El cielo se lleno de colores, cientos de fuegos artificiales retumbaban a todo lo largo y ancho de la ciudad. Era el color de la victoria.
Venezuela una vez más fue fiel a su historia. Y es que somos un país que siempre históricamente ha demostrado estar comprometido con la lucha democrática, miles de ejemplos hay al respecto. Viajando a través del tiempo, hay que recordar todas las batallas que libro Venezuela para lograr la independencia de España. En memorias mas actuales, ya en el siglo XX, hay que rememorar el movimiento estudiantil contra Juan Vicente Gómez en 1928; el movimiento cívico-militar contra el dictador Marcos Pérez Jiménez el 23 de enero de 1958 y así se pueden mencionar miles de hechos que demuestran el espíritu de lucha de este pueblo.
Si bien es cierto que nos encontramos hoy ante un gran triunfo, no hay que perder de vista que parte de esta victoria se debe a dos hechos importantes: 1) Muchos chavistas se pasaron a las filas de la oposición en esta elección, no porque desconfíen de su líder, sino porque los cambios que plateaba la reforma atentaban contra sus intereses políticos y económicos y es que acaso la alta dirigencia chavista, estaba dispuesta a repartir sus riquezas con el pueblo? Estaría la nueva clase política que a lo largo de estos anos se ha enriquecido y ha ganado poder dispuesta a perderlo para dárselo todo Chávez? La respuesta es que no. Por lo tanto, hoy Chávez tiene que reflexionar sobre esta derrota, no pensar que es solo el desquite de la oposición. Porque, podríamos decirle a Chávez que su propia gente lo traiciono, porque la idea de un Estado socialista totalitario al estilo de la antigua Unión Soviética no tiene espacio en un mundo capitalista y menos aun en una Venezuela acostumbrada a la riqueza, por ser un país petrolero. La realidad es que aquí hasta el más pobre es rico, si lo comparamos con los grados de pobreza de otras zonas de la región o del mundo.
En segundo lugar, gran parte de este triunfo se debe al nacimiento del movimiento estudiantil, con nuevos líderes, que se perfilan como la generación de relevo que por muchos anos necesito Venezuela. Estos jóvenes le dieron nuevas esperanzas al país, a la gente, una vez que tuvieron la valentía de salir a las calles con nobleza, no por intereses políticos o económicos, sino porque simple y sencillamente les dolía Venezuela. Porque tomaron consciencia de que era necesario rescatar los valores de la democracia y pedir que se respetara la libertad.
Hoy Venezuela amaneció feliz. Hay que celebrar y disfrutar el triunfo. Pero, hay que tener muy claro, que también hoy se dio el primer gran paso, la lucha apenas comienza. Ahora la oposición tiene la gran tarea de plantear un proyecto de país que no solo convenza a todos aquellos que están en contra de Chávez, sino también a todos los que aun están a favor de el. Tienen que lograr reunir a una nueva mayoría y para eso hace falta mucha inteligencia, astucia y destreza política.
Hoy, muchos despertamos de un largo letargo que por momentos parecía eterno y en este grupo me encuentro. Porque estaba sumida en una profunda apatía y depresión, no creía en nada y no confiaba en nadie, lo que me llevo incluso a perder la fe hasta en mi misma y en lo que hacia. Los que tienen tiempo conociéndome saben que siempre he sido periodista y que para mi la palabra es la gran huella de la vida y de la historia. A raíz de todos los acontecimientos políticos que ocurrieron en el país, de los ataques, intimidaciones y persecuciones que me toco vivir cuando fui Productora de Prensa Internacional de RCTV (canal que salio ya del aire por resolución de Hugo Chávez) perdí el optimismo y decidí cambiar de área, empecé a dedicarme a la publicidad, a otras áreas de la comunicación. No lamento esta experiencia profesional. Pero, hoy, despierto, recordando que el Periodismo, se lleva en las venas, no es algo de lo que puedas prescindir por mucho tiempo, cuando lo sientes parte de ti.
Hoy me di cuenta que es un error dejar de hacer lo que hacia y vivir de fotos amarillas. Creo que le di demasiado poder a Chávez, como si fuera poco todo el que tiene ya. Le di el poder de escoger por mi, deje mi responsabilidad en sus manos, asumí la actitud mas cómoda al decir que la culpa de todo la tiene el. Que paso con mis convicciones? Que paso con mis sueños?
El mensaje que deseo transmitirles es que nadie tiene derecho a opacar sus vidas, ni Chávez, ni la oposición, ni nadie. El poder esta en cada uno de nosotros y en nuestra certeza de que somos seres humanos que siempre, hasta en el peor de los escenarios tenemos la capacidad y la voluntad de elegir el destino que queremos, porque la libertad se sustenta en ese principio, en la posibilidad de escoger. La moraleja de todo esto es que no hay nube gris que no de paso al sol y a todos ustedes los invito a continuar adelante con sus sueños y desde cualquier rincón del mundo en el cual nos encontremos, hagamos lo correcto, seamos fieles a nuestros principios y convicciones para hacer del mundo en que vivimos un espacio donde se honre al ser humano, donde se celebre la libertad, la paz y la democracia.
Maria Eugenia Fanti
Periodista, Productora de TV.
Las tensiones se hicieron sentir, en especial, una vez que el reloj apuntaba que habían transcurrido más de siete horas desde que la Rectora Principal del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena ordeno que se cerraran las mesas de votación.
La oposición se preguntaba ¡Que estaba sucediendo? Porque la demora? Será que el gobierno desea hacer un fraude? A su vez los rumores sobre los resultados por momentos daban al Si como ganador, luego al No, era una situación de total incertidumbre, la gran pregunta era: Defenderá Venezuela su democracia o acaso esta dispuesta a perder su protagonismo como un país suramericano que a lo largo de su historia busco la libertad?
Llego el momento crucial. Pasada la una de la mañana, el CNE dio el primer boletín con los resultados, fue entonces cuando el pueblo venezolano pudo confirmar el triunfo del NO y es que se trataba de la primera victoria de la oposición en los nueve anos de gobierno que tiene Hugo Chávez Frías.
Inmediatamente que esta noticia se hizo publica, se escucho un eco de alegría, las voces de miles de personas que al unísono gritaban “GANAMOS, VIVA VENEZUELA GANAMOS”, se escuchaban coros de jóvenes cantando: “yo me quedo en Venezuela porque yo soy optimista”, “Estudiantes, libertad”, “Viva la democracia”. El cielo se lleno de colores, cientos de fuegos artificiales retumbaban a todo lo largo y ancho de la ciudad. Era el color de la victoria.
Venezuela una vez más fue fiel a su historia. Y es que somos un país que siempre históricamente ha demostrado estar comprometido con la lucha democrática, miles de ejemplos hay al respecto. Viajando a través del tiempo, hay que recordar todas las batallas que libro Venezuela para lograr la independencia de España. En memorias mas actuales, ya en el siglo XX, hay que rememorar el movimiento estudiantil contra Juan Vicente Gómez en 1928; el movimiento cívico-militar contra el dictador Marcos Pérez Jiménez el 23 de enero de 1958 y así se pueden mencionar miles de hechos que demuestran el espíritu de lucha de este pueblo.
Si bien es cierto que nos encontramos hoy ante un gran triunfo, no hay que perder de vista que parte de esta victoria se debe a dos hechos importantes: 1) Muchos chavistas se pasaron a las filas de la oposición en esta elección, no porque desconfíen de su líder, sino porque los cambios que plateaba la reforma atentaban contra sus intereses políticos y económicos y es que acaso la alta dirigencia chavista, estaba dispuesta a repartir sus riquezas con el pueblo? Estaría la nueva clase política que a lo largo de estos anos se ha enriquecido y ha ganado poder dispuesta a perderlo para dárselo todo Chávez? La respuesta es que no. Por lo tanto, hoy Chávez tiene que reflexionar sobre esta derrota, no pensar que es solo el desquite de la oposición. Porque, podríamos decirle a Chávez que su propia gente lo traiciono, porque la idea de un Estado socialista totalitario al estilo de la antigua Unión Soviética no tiene espacio en un mundo capitalista y menos aun en una Venezuela acostumbrada a la riqueza, por ser un país petrolero. La realidad es que aquí hasta el más pobre es rico, si lo comparamos con los grados de pobreza de otras zonas de la región o del mundo.
En segundo lugar, gran parte de este triunfo se debe al nacimiento del movimiento estudiantil, con nuevos líderes, que se perfilan como la generación de relevo que por muchos anos necesito Venezuela. Estos jóvenes le dieron nuevas esperanzas al país, a la gente, una vez que tuvieron la valentía de salir a las calles con nobleza, no por intereses políticos o económicos, sino porque simple y sencillamente les dolía Venezuela. Porque tomaron consciencia de que era necesario rescatar los valores de la democracia y pedir que se respetara la libertad.
Hoy Venezuela amaneció feliz. Hay que celebrar y disfrutar el triunfo. Pero, hay que tener muy claro, que también hoy se dio el primer gran paso, la lucha apenas comienza. Ahora la oposición tiene la gran tarea de plantear un proyecto de país que no solo convenza a todos aquellos que están en contra de Chávez, sino también a todos los que aun están a favor de el. Tienen que lograr reunir a una nueva mayoría y para eso hace falta mucha inteligencia, astucia y destreza política.
Hoy, muchos despertamos de un largo letargo que por momentos parecía eterno y en este grupo me encuentro. Porque estaba sumida en una profunda apatía y depresión, no creía en nada y no confiaba en nadie, lo que me llevo incluso a perder la fe hasta en mi misma y en lo que hacia. Los que tienen tiempo conociéndome saben que siempre he sido periodista y que para mi la palabra es la gran huella de la vida y de la historia. A raíz de todos los acontecimientos políticos que ocurrieron en el país, de los ataques, intimidaciones y persecuciones que me toco vivir cuando fui Productora de Prensa Internacional de RCTV (canal que salio ya del aire por resolución de Hugo Chávez) perdí el optimismo y decidí cambiar de área, empecé a dedicarme a la publicidad, a otras áreas de la comunicación. No lamento esta experiencia profesional. Pero, hoy, despierto, recordando que el Periodismo, se lleva en las venas, no es algo de lo que puedas prescindir por mucho tiempo, cuando lo sientes parte de ti.
Hoy me di cuenta que es un error dejar de hacer lo que hacia y vivir de fotos amarillas. Creo que le di demasiado poder a Chávez, como si fuera poco todo el que tiene ya. Le di el poder de escoger por mi, deje mi responsabilidad en sus manos, asumí la actitud mas cómoda al decir que la culpa de todo la tiene el. Que paso con mis convicciones? Que paso con mis sueños?
El mensaje que deseo transmitirles es que nadie tiene derecho a opacar sus vidas, ni Chávez, ni la oposición, ni nadie. El poder esta en cada uno de nosotros y en nuestra certeza de que somos seres humanos que siempre, hasta en el peor de los escenarios tenemos la capacidad y la voluntad de elegir el destino que queremos, porque la libertad se sustenta en ese principio, en la posibilidad de escoger. La moraleja de todo esto es que no hay nube gris que no de paso al sol y a todos ustedes los invito a continuar adelante con sus sueños y desde cualquier rincón del mundo en el cual nos encontremos, hagamos lo correcto, seamos fieles a nuestros principios y convicciones para hacer del mundo en que vivimos un espacio donde se honre al ser humano, donde se celebre la libertad, la paz y la democracia.
Maria Eugenia Fanti
Periodista, Productora de TV.
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